Una púa para cada nivel y estilo con la guitarra.
A la hora de tocar con púa encontramos en el mercado un gran abanico de posibilidades. Pero lo más destacado es la diferencia de grosores que podemos comprar. Hay púas muy delgadas de apenas medio milímetro y otras mucho más gruesas de hasta 2 milímetros o incluso más. ¿Cuál es la que más nos conviene? ¿o es una cuestión personal?
En principio, para comenzar a tocar la guitarra o si somos novatos empezando un curso de guitarra, lo más recomendable es tocar con una púa bastante delgada. La razón es que una púa delgada puede ayudarnos cuando nuestra pulsación con la mano derecha es poco precisa, por ejemplo al tocar acordes o ritmos. Sin embargo, a la hora de realizar puntéos esta ventaja puede volverse en contra nuestra.
Repasemos algunas púas de diferentes grosores y algún uso interesante:
Una púa de 0,5 mm es ideal para empezar a tocar acordes y ritmos, sobre todo con una guitarra acústica. La gran ventaja es que al ser una púa muy flexible, cuando tocamos con imprecisión (al ser principiantes), podemos aprovechar que la púa se dobla y no se atasca entre las cuerdas. De esta forma podemos centrarnos más en la mano izquierda y las posiciones de los dedos.
Utilizando una púa de 0,88 mm podemos empezar a tocar punteos y también acordes. Al ser un poquito más gruesa que la anterior nos dará más precisión al tocar puntéos. Una púa demasiado fina puede doblarse demasiado y parecer un pincel, impidiendo tener un control de todos y cada uno de los golpes que damos a una cuerda. Esto impide tocar muy rápido y mantener el control, sobre todo si no somos profesionales.
Un paso más sería la púa de 1 mm. Con ella podemos estar cómodos tanto en la interpretación de melodías como en la de acordes. Sin embargo no es lo suficientemente rígida para determinados estilos. Algunos guitarristas de jazz necesitan púas de mayor grosor.
Las púas de 1.14 son unas púas relativamente duras y verdaderamente todo-terreno. Con ellas un guitarrista de nivel medio-avanzado puede tocar cómodamente cualquier estilo. Algunas como el modelo TORTEX de Dunlop incorporan un polvo en su superficie que mejoran el agarre y evitan que se nos resbale entre los dedos.
En último lugar encontramos púas más gruesas como las de 2 mm, muy utilizadas por solistas que desean tener el control en cada pulsación. Permiten tocar a gran velocidad, aunque no son recomendables para tocar suavemente acordes o arpegios por principiantes.
Tanto las púas de 1 mm. como las de 1.14 pueden cambiar sus características si utilizamos tres dedos para agarrarlas. Utilizaremos el dedo índice y medio de la mano derecha por la parte de abajo de la púa y el pulgar por la parte superior. Presionando ligeramente el pulgar haremos que el comportamiento de la púa se parezca más a una púa de 2mm, por ejemplo para tocar con ímpetu acordes de quintas. Dejando "bailar" la púa entre los tres dedos (como si tuviera una suspensión entre las yemas de los dedos) se comportará como una púa de 0,88 mm. lo que nos permitirá tocar acordes de forma más suave.
Sea cual sea tu estilo y tu destreza hay una púa para tí. En el curso de guitarra puedes tocar con los dedos o mediante una púa. ¿empezamos?
Comments